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De La Afición

Zapoteco / Español / English

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Yela Sdanralle

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Chenteze zeja 6 rasa dxozoja che bene to kue ki nombeadxo ka Chivas, en ba nozua yichja yogote da kan nozua yichja bene kan sjakarenhe che bene witja ki, cheze dxonte den ka da llebedxo, rawe shre’dxo ka dxeleda en ka dxelue dilla bene ki dxeledanenhe to equipo, a che lenan dxendxo dxelenhe che bene ki fanáticos. Kebe neze gakaxha chen yogoroze beneache bia dxirje to da chjalirallee to da dxekenhe lenan goreen le’ gaka cho’e nheza dxakate zue yexlayo, sjalla bene dxeledanenhe to kue bene witja, kan zeja chedxo dxi’o; naljadxo dxaka ki rawe kate dxjataralledxo kebe dxelleredxo dan zeralledxo, nha yela kebe shzuadxo tipa chjaxakadxo dan dxakaralledxo nha kon da nedxo goree bene dxi’o, kon da nha’ shzidxo, nha dxalaralledxo yelawirja yeladxeshirja nhaka chedxo bradxo yexlayo, da nhan dxondxo kan.  

 

Ba goka to chopa xman, no’rawezoja Elena Ponistowska, bzetje no’ra Juchitán, gonhe chie no’ra ki “gordas”. Dali gonhe, yogoze no’radao ki sjanhake kan, cheze da bennan, yogoze bene sinha lla yelle nhi kebe bledanenhe dan gonha no’rawezoja nhi, kere nho na: re bene nhi, kere da chawe dxaka chedxo nhakadxo kan, a kebe nhaka den da gakarenan beneache che sue chawe che chadi gonhe da dxala gonhe, golakarabe tora, rawe ba yoo yichjabe kaze nhaka bene lla nha’, ba dxonten che kebe nhake kan kebe nhake bene lo yelle nha’; en kan dxonan rawe batate nhaka kan, nha kon nadxo ba goyoorao bene nha kanteze ba nhaka xbabee, nha dxonten kebedxa bide gaka gaka, kon kan ba nhaka. Nhedanda to warazia, to dxebanetekenha dxaka ki, rawe shda yelle waralle che Laa, ba jaxakaa to kue bene dxolochalje, nha benna dxelenhe, kebexha noreen yane xdan to bene natonatere, nha dxelnhe to bene tona wa sdebe dxelekenhe bi llin tabagee gonhe, kate to bene ba dxonhre xbaba ki ba dxirjarallee to da kebezeje  geyonhen da chawe. Rawe dxonha xbaba ki, dxekenha nheda: dxi’o shdanedxo witja nhi en zejadxo kolle bene chivas ki, dxala chejarendxon cheweralle cheka chjatin kuinhadxo kan shre’dxo dxaka. Dxi’o tika shdanedxo bene to kue ki, leake gozoraoake golebeke xhan ni’a che yela nhaka mexicano, nha che dxi’o kebe gondxo yelawesaka, naxholle gonhite xneza gozorao equipo chedxon, kan ne shbezaralledxo.

            

 

De La Afición

Apenas van 6 pequeñas notas hablando sobre las Chivas, y como que cada día resurgen mis instintos de aficionado al futbol. Vuelvo a tener esa conducta de fanático, como se les llama a los simpatizantes de algún equipo. Quién sabe qué será pero hay en el ser humano esa disposición a volverse incondicional de alguna idea o creencia, a veces de alguien y en nuestro caso de un equipo. Tal vez esto sucede porque buscamos una idea que se acerque a nuestro modelo de vida ansiado y nos aferramos a ella cuando la encontramos. Sin embargo, olvidamos que eso es sólo una percepción.

Hace algunos días, la escritora Elena Ponistowska* hizo un comentario sobre las mujeres de Juchitán, en el cual las llamó “gordas, inmesas”, haciendo una comparación sobre la talla entre las mujeres que bebían pulque antes del surgimiento de la industria cervecera y las que actualmente consumen cerveza. Aunque es una verdad lo que dijo esta escritora, a los intelectuales juchitecos no les gustó este señalamiento. Se molestaron porque han asumido que ese estado es una característica o parte de la cultura zapoteca del istmo, sin darse cuenta que la obesidad es perjudicial para la salud e incluso un obstáculo para cualquier actividad. Han sido tantos años arrastrando ese lastre, que acostumbran el cuerpo y acondicionan la mente para no mejorar su aspecto y salud.

En lo particular, esto no me asombra mucho. En una ocasión oí decir en un pueblo de la sierra oaxaqueña, que tiene bastantes problemas de desnutrición, que las personas altas se ven feas y su altura causa muchas dificultades en el trabajo. Evidentemente, con estas ideas se están preparando para aceptar como normales las secuelas de la desnutrición.

Pensando en nuestra afición al futbol y simpatía hacia las chivas, yo por mi parte considero que debo ser muy cauto para no deslizarme en una incondicionalidad ciega y violenta. Tenemos un equipo que históricamente inició la forja de una mexicanidad, que posiblemente hoy en día ha decaído; pero de la afición que sentimos por ellos, si no olvidamos la coherencia, va a depender que este equipo avance de acuerdo al sueño original.
        


 

Regarding Fanaticism

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It’s only been six short notes that I have written about Chivas and it seems like every day my futbol instincts surface. Those things that some may call fanaticism and attribute regularly to the followers of a team. Who knows what it is, but there is something human about the disposition of becoming an unconditional supporter of some idea or belief. In some cases of someone, but in our cases of a team. Perhaps it happens because of the frustration or difficulties of not being able to find the kind of life we desire. We cling on to the first thing we think gets us closer to that life, forgetting that this is just the first iteration of our search towards the ideal.

 

A few days ago, the writer Elena Ponistowska* spoke about the women of Juchitán and called them “fat”. Although her statement was true, and the context in which she said it was a damnation of the breweries that have, through aggressive tactics, succeeding in replacing their traditional drink, the intellectuals of the Juchiteco community reacted angrily. No one recognized the negative aspects of obesity (because it is a threat to health and an obstacle to physical activity). They became annoyed because they assumed that this was a characterization of the Zapotec culture of the isthmus. Negative characterisations have been the norm for so many years that the mind and body becomes conditioned to responding a certain way and better perspectives are seldom worth pursuing.

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Personally, this does not surprise me much. In a town in the Oaxacan sierra that has nutritional problems, I heard it said that tall people look ugly and that being tall leads to work difficulties. Obviously these opinions can lead to the normalization or even the promotion of malnutrition.

 

With regard to our fandom of futbol and our affinity towards Chivas, I for one think that I need to be wary so that I do not succumb to violent and blind unconditional-ness. We have a team that was historically forged from a Mexican identity that perhaps today has decayed. But it is up to our explicit effort, as its fans, to not forget about coherence. Whether this team blossoms into the team that matches the one in our dreams depends on this.

 

 

*Comentario oficial de Elena Poniatowska:

El domingo 5 de noviembre, en la espléndida exposición en Etla, Oaxaca, tuve el privilegio de entrevistar a Graciela Iturbide y rendirle homenaje antes de que todos viéramos las 220 fotos que se exponen en un espacio excepcional que rescató Francisco Toledo. Recordé que la fotógrafa Tina Modotti vino a Oaxaca hace años y tomó fotografías de mujeres muy delgadas dentro de sus huipiles, en el mercado de Juchitán, porque bebían pulque y no había surgido la industria cervecera ya que al canjear el pulque por la cerveza engordaron. Lo hice sin ningún ánimo de ofender, hablé festivamente y hasta me dirigí a dos jovencitas en primera fila muy delgadas y dije "delgaditas" como ustedes. De mí misma, suelo decir con frecuencia que además de mis 85 años tengo una panza de hipopótamo y no lo digo como insulto sino constatación humorística.

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Si es más noticia un comentario sobre la gordura de las mujeres y resulta más importante que toda la situación política de nuestro país después de los dos sismos que acabamos de padecer- Oaxaca en particular- me parece que mi comentario solo sirve de distractor inflado de mala fe.

 

Siempre he amado a Oaxaca, escribí "Juchitán de las mujeres" con una gran fotógrafa que admiro y considero mi amiga, Graciela Iturbide. Me he solidarizado desde hace más de 30 años con todas las causas de Francisco Toledo y me dio gusto que no se instalara un Burger King en el zócalo de Oaxaca. Escribí con devoción por Jesusa Palancares, la novela "Hasta no verte Jesús mío" que versa sobre la vida de una mujer extraordinaria nacida en Miahuatlán, Oaxaca, lo mismo que la novela "El tren pasa primero" basada en la vida heroica de Demetrio Vallejo, oaxaqueño ejemplar, Sobre Oaxaca he escrito infinidad de artículos. Por lo tanto, además de feminista, considero ser una gran amorosa de Oaxaca.

 

En estos tiempos que anteceden a la elección del 2 de julio de 2018, se exacerban los ánimos y las susceptibilidades. Así comprendo la interpretación de mis palabras en el homenaje a la extraordinaria Graciela Iturbide,

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-- Elena Poniatowska Amor.

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